El mundo de la pintura tiene piezas verdaderamente icónicas, esas pinturas que lo mismo puedes verlas en una gran sala, que en una parodia o alguna referencia en películas, series, novelas, son las pinturas más conocidas de toda la historia y acá te las mostramos para fortalecer tu conocimiento de cultura general y de la pintura, en específico.
La Mona Lisa o Gioconda
Famosa por ambos nombres, se ha convertido en una gran obra referencia del genio Leonardo Da Vinci. Existen muchos rumores o mitos sobre la pintura, algunos dicen que es un autorretrato de Da Vinci, otros que se trata de la madre del pintor. Su sonrisa a medias es enigmática y ha causado preguntas a millones de personas, ya que es la pintura más conocida de la historia.
Guernica de Pablo Picasso
7,77 metros de ancho y casi 3 metros y medio de alto, lo convierten en uno de los cuadros más grandes del mundo, pero lo más importante es el tema. Picasso reflejó el sufrimiento de las víctimas del pueblo de Guernica, que fue destruido por el ejército nazi con un bombardeo criminal en 1937, causando más de 2000 muertes.
La Noche Estrellada de Vincent Van Gogh
Es una de las obras más particulares, algunos dicen que muestra la mente del autor para el momento. Lo cierto es que el cielo estrellado nos muestra un cielo azul que parece vivo, con remolinos manifestándose aquí y allá y trazos aparentemente desordenados que muestran una gran conexión del artista con la naturaleza. Algunos expertos aseguran que Van Gogh incluso dibujó el planeta Venus de manera clara en su pintura.
La Joven de la Perla, Johannes Vermeer
El neerlandés Johannes Vermeer pintó el cuadro, que se conoce como “muchacha con turbante”, en 1665, hace mucho énfasis en la mirada de la chica, de quien se dice era sirviente en la casa del artista, por sobre el hombro, además la perla a la que hace referencia el título permanece como punto central de la pintura, es decir, la atención de quien mira recae de inmediato en este elemento.
Las Meninas de Velásquez
El famoso pintor español Diego Velásquez, se concentró en hacer una pintura bastante realista, en este caso el tema es la infanta Margarita, hija de Felipe IV, pero rodeada de todos los elementos en el taller del pintor.
El Nacimiento de Venus, de Botticelli
En el cuadro, la diosa Venus parece emerger del mar, con un desnudo y rodeada de ángeles. Tiene una gran delicadeza en sus trazos y es una pintura realmente grande, cubre 1,80 metros de alto por 2,75 de ancho. Para el momento, los mitos de la antigüedad volvían a mostrarse en las pinturas, en pleno renacimiento.
